Vamos a hablar hoy en Siu Esencias Florales sobre el despecho y las penas del amor. Cuando un hueso se rompe, cuando se sana, se sana mejor; cuando un corazón se rompe, se repara mejor.
¿Cómo hacer que la compasión llegue a nosotros en un momento de pena y dolor por un corazón herido?
Lo primero que toda persona debe hacer cuando pierde algo o pierde a alguien es preguntarse ¿Qué es lo que perdiste?, y ¿Realmente perdiste algo o a alguien?. Lo realmente importante es entender que lo que perdiste es el bienestar que tenías con esa persona. En lugar de superarlo, nos enfrascamos en reemplazarlo por otra persona o en hacer lo que le molestaba a la otra persona. Pero no pensamos en el tipo de bienestar que nos proveía la otra persona y tampoco nos preocupamos por encontrarlo en nosotros mismos.
Es crucial entender que el amor está en nosotros mismos. Es cierto que nos enamoramos y este enamoramiento nos lleva a enaltecer a la otra persona y creer que es la encargada de darme amor, le damos la llave de nuestra felicidad. Mientras nosotros seamos amor y nos amemos a nosotros mismos, podemos amar libremente a los demás.
Desde la Neurociencia, el enamoramiento tiene 3 etapas, estas: la primera es el deseo, esta primera fase gobierna la pasión y el deseo carnal, la segunda es el enamoramiento y las personas están en la búsqueda de la unidad y esperan encontrarlo en la otra persona, nos encontramos en una fase de quererlo todo, de impulso, de aceptación y codependencia. En la tercera etapa llega el amor, en donde el amor es más libre.
El enamoramiento no es amor. El enamoramiento es un impulso que nos hace adictos de alguna manera a los estímulos, es una etapa biológica en donde el ser humano se embarca en una búsqueda hasta llegar al verdadero amor, pero tranquilo, el enamoramiento no es malo, es una etapa y una fase que todos vivimos y nos encanta vivir, pero en la última etapa llegamos a un acuerdo, llegan los límites, llega la ternura, el equilibrio. Cuando encontramos el amor, llega el disfrute de amar.
Cuando una persona está despechada, en Siu Esencias Florales creemos que es falta de amor y por ende necesita amar, y amar es ayudar a encontrar al otro la libertad y encontrarla en nosotros mismos. Encontrar el amor que hay dentro de nosotros es dar y compartir ese sentimiento al mundo, a un todo y no a una sola persona. Esto lo experimentamos en el momento en que perdemos, en el que valoramos, en el que aprendemos a amarnos y amar.
El amor propio es el camino al amor libre, sin ataduras, sin exigencias. Cuando nos amamos, no exigimos al otro, compartimos el amor y caminamos junto a él, pero no nos hace falta porque ya está en nosotros, la fuente del amor está en uno mismo y es el primer paso para sanar cualquier relación y ruptura.
¿Cuál es el papel de Siu y las esencias florales en el despecho?
Las esencias florales nos ayudan a conectarnos con nuestras emociones y sensaciones para equilibrar y potencializar positivamente esas experiencias que nos estimulan a vivir de una forma diferente. El primer paso para sanar cualquier corazón roto, es el amor propio. La esencia floral de Mimosa, trabaja sobre el amor propio, para aprender a amarnos a nosotros mismos y experimentar el amor. Esta flor nos ayuda a desligar la fuente del amor desde el otro y dejar de culpar, ya que el amor y los estímulos de felicidad están en nosotros.
Otra esencia que nos ayuda a sanar el dolor causado por una ruptura es el Corazoncillo, una flor muy hermosa con forma de corazón roto. Esta esencia nos ayuda a amar, a potencializar el amor a nuestro alrededor, es la representación de “cuando un hueso se rompe, cuando se sana, se sana mejor”.
Otras esencias de Bach que te pueden ayudar en este proceso son la Achicoria, que nos ayuda a eliminar la dependencia que sentimos hacia el otro. También tenemos la flor Nogal que ayuda a fortalecernos para romper con el vínculo desde la creencia e ideas de la otra persona que nosotros adoptamos y por último el Castaño Blanco que nos ayuda a eliminar las ideas reiterativas, como el pensamiento constante en esa persona, ¿qué hace?, ¿por qué no me llama?, etc.
Para cualquier ruptura es clave comprender que lo que llamamos amor, está en nuestro interior, es un sentimiento que ya está en nosotros, al enamorarnos le damos el poder a la otra persona de ser ese proveedor, en una ruptura la clave es perdonar desde el amor propio, sin rencor, sin odio. Eso lo logramos al experimentar con autenticidad lo que sentimos, encontrando esos estímulos que nos hacen feliz sin que vengan de la otra persona.
Más esencias para el corazón roto
Las esencias de Bush tienen características diferentes, ya que vienen desde la tierra. En estos momentos de gran dolor, recomendamos también este segundo grupo de esencias florales como, Fringed Violet, Boronia y Red Suva, estás trabajan la sensación del impacto al inicio de una ruptura, ese gran momento de dolor en donde no soportamos el momento, en donde la tristeza y la ira es muy grande, logrando quitarle el poder al otro y recuperando nuestro amor propio.
Las orquídeas también juegan un papel muy importante en la sanación y labúsqueda del amor propio. Hay una esencia floral llamada Orquídea del Amor. Esta flor nos ayuda a potencializar el amor por la vida, por los momentos, a sentirnos en paz y amando a cada instante.
Todo proceso de duelo, lleva diferentes momentos, pero llegamos a un punto en donde, debemos asumir lo que sentimos. Entender que ese amor que nos hace falta lo tenemos dentro de nosotros, al aumentar nuestro amor propio terminamos sintiendo un bienestar diferente.
El duelo real llega cuando desde la gratitud ya no nos sentimos necesitados. La gratitud se activa y nuestras emociones sienten una transformación que viene del mayor aprendizaje que nos deja el dolor, pero que nos invita a encontrar la unidad en nosotros.